Alcohol

¿Cómo actúa?

El alcohol es un depresor del sistema nervioso central que adormece progresivamente el funcionamiento de los centros cerebrales superiores. Es una droga aceptada socialmente, no obstante, los problemas que ocasiona el consumo excesivo de alcohol a veces no se notan hasta que ha pasado bastante tiempo, por lo que ni el bebedor ni su entorno los percibe o no les dan importancia. 

Además, el organismo se adapta a la presencia de alcohol y a tolerar los efectos psíquicos, por lo que el bebedor cuando empieza a percibir las consecuencias negativas no puede creer que sean por el consumo de alcohol y las atribuye a otras causas.

  • Efectos físicos: Disminución de reflejos, dificultades para hablar, descoordinación motora, estado de apatía y somnolencia, aumento de la sociabilidad, accidentes de tráfico, retirada de carnet de conducir…

 

  • Efectos psicológicos: Pérdida de memoria, depresión, alteraciones del sueño, dificultad para asociar ideas, distorsión de la realidad, celos patológicos, agresividad, impulsividad, baja tolerancia a la frustración…

¿Cómo puedo saber si necesito ayuda para dejar el alcohol?

  • Decides reducir la cantidad de alcohol que consumes, pero sientes que pierdes el control y no eres capaz hacerlo.
  • Te sientes mal o culpable por beber.
  • Cuando bebes, te expones a situaciones de peligro.
  • Te sientes ansioso e irritable cuando no estás bebiendo.
  • Necesitas beber desde primera hora del día para sentirte mejor o para aliviar la resaca del día anterior.
  • Tu entorno te ha pedido que dejes de beber.
  • Beber te está causando problemas en tu familia o trabajo.
  • A pesar de haber desarrollado problemas de salud, no eres capaz de dejar de beber.
  • Al intentar dejar de beber alcohol presentas síntomas de abstinencia (problemas para dormir, temblores, irritabilidad, ansiedad, estado de ánimo deprimido, inquietud, náuseas y/o sudores, incluso fiebre, convulsiones o alucinaciones).
¿Necesitas nuestra ayuda?